La intuición profética en una mujer de Dios: Chiara Lubich

21 de enero de 2020

"Era una gran líder espiritual, llevando a los cristianos a estar en el mundo, influyendo para que se implicaran en la política."

Compartir en:



"Desde la primera vez, su mirada me penetró. Y esa impresión permanece hasta el día de hoy", comenta al portal Catholique Suisse Isabelle Catzeflis, miembro de los Focolares desde hace 45 años. Se reunió con Chiara Lubich alrededor de diez veces "y cada vez con la misma sorpresa. Tenía ante mí una madre, una hermana, una mujer, una amiga, una persona tan sencilla, perspicaz, llena de luz y sabiduría", dice Isabella.
 
Chiara Lubich, fallecida el año 2008, fue una mujer de Dios, laica, católica,  que fundó el Movimiento de los Focolares en 1943, en medio de la segunda guerra mundial, con la intuición profética de crear pequeñas comunidades destinadas a ser "focolares de contagio" de la fe cristiana.  Un proceso que creció rápidamente. Hoy en día, el movimiento, que acoge a personas que provienen de diversos credos y religiones, está presente en 182 países, con más de dos millones de miembros.
 
Liderazgo espiritual

 
Desde Suiza Beatrix Ledergerber recuerda con cariño sus tres encuentros con Chiara Lubich. "Era una mirada, una modestia, una humildad, una presencia impresionante (…) Frente a ella, quienquiera que fueras, te sentías importante". Era una mujer sencilla y simple, pero también una poderosa fuente de inspiración.
 
"Ella llevaba consigo coraje, perseverancia, al comunicar con alegría y convicción la victoria de Jesús", agrega Catzeflis.
 
Este carisma Chiara Lubich lo puso al servicio de promover los valores del Evangelio que consideraba esenciales. "Era una gran líder espiritual, llevando a los cristianos a estar en el mundo, influyendo para que se implicaran en la política. Ella dio a miles de hombres y mujeres la fuerza para comprometerse en la construcción del Reino de Dios en la tierra”, complementa Beatrix Ledergerber.
 
"Juntos" hacia la santidad

La fuerza del testimonio de Chiara Lubich ha sido repetidamente alabada dentro de la Iglesia Católica. En 2015, el Papa Francisco recordó el "luminoso ejemplo de vida" dejado por esta laica italiana. "Los miembros del Movimiento de los Focolares han sabido ser apóstoles del diálogo, un medio privilegiado para promover la unidad", escribió también Juan Pablo II en 2003.
 
La fase diocesana de la causa de beatificación de la Fundadora del Movimiento de los Focolares se cerró oficialmente el 10 de noviembre de 2019. Fue un camino hacia la canonización que Chiara Lubich nunca hubiera querido realizar sola, ya que su gran plan era, como nos recuerda Isabelle Catzeflis, que "todos se hicieran santos juntos".
 


 

Compartir en:

Portaluz te recomienda