Johannes Hartl y su cruzada de Adoración a Dios: "La oración no lo es todo. Pero sin oración todo es nada"

06 de abril de 2018

Este teólogo y padre de cuatro hijos reconoce que "la creencia en la intervención sobrenatural y en los milagros de Dios es más frecuente en otras regiones de la tierra que aquí" (en Alemania). Es por esto que con su esposa fundaron una "Casa de Oración".

Compartir en:



La cita entre comillas del título es una certeza que anima la fe del matrimonio católico formado por Jutta y Johannes Hartl en Ausburg (Alemania).  El año 2005 -como un signo concreto de su amor a Dios- decidieron fundar una particular Casa de Oración: “Un lugar donde todo se trata de adorar a Dios, las veinticuatro horas del día, todos los días del año”.
 
Entrevistado por ERF Medien Schweiz (ver video al final) y el portal Kath.net,  Johannes -que es también padre de cuatro hijos, con estudios en filosofía y un doctorado en teología- reconoce la pérdida del sentido de lo sagrado en los cristianos de Alemania.  Ante esta realidad, propone como camino de conversión orar, pero solo teniendo por finalidad el gozo de “adorar a Dios”.
 

Respecto del teocentrismo, usted ha dicho que todo en la Casa de Oración (en Augsburg) gira en torno a Dios, no a las personas, ¿cómo se puede entender esto?
Es fundamental que todo en la vida de un cristiano gire alrededor de Dios. Fuimos creados para conocerlo y amarlo. Sin embargo, vivimos en un mundo de expectativas y demandas humanas. Así pues es habitual que las opiniones de los demás o simplemente el poder de la costumbre surjan una y otra vez: Lo que piensa el vecino; el ‘tal como todos lo hacen’; el ‘qué dirá la gente’. Y para nosotros, cristianos, debería ser mucho más fácil orientarnos hacia lo que es verdadero ante Dios, lo que cuenta en la eternidad.
Entonces, un lugar donde todo gira en torno a la oración nos recuerda que el objetivo de la Iglesia no es vivir sólo para el mundo, sino para Dios. "Teocéntrico" significa que Dios está en el centro.

También afirma que la adoración a Dios debe ser sin un fin. ¿Acaso la Iglesia Católica de la A a la Z no tiene ya un propósito que no podemos romperlo?
Todo comienza en tu propia vida. El mandamiento del sábado en el Antiguo Testamento recuerda al hombre que él es más que su obra. Que la alegría del Creador en la existencia del mundo es el fundamento de todo. ¿Puedo no hacer nada por una vez? ¿Me tomo el tiempo para estar allí en la presencia de Dios? ¿O es la oración ya una vez más un trabajo religioso, un servicio para ganar algo a través de ella? La liturgia y cada acto de culto está en peligro de tener un propósito. Pero entonces algo de la belleza siempre se pierde.
Que la liturgia sea un acto sagrado, que la adoración no tenga que cumplir ningún otro "propósito" que no sea el de que Dios se goce de mí y yo me goce en él: son actitudes básicas que siempre vuelven a surgir, pero que empiezan por el individuo.

En su tesis doctoral "Claridad de la Anunciación" señala que la rectitud no pretende escandalizar y que el amor es más que simplemente satisfacer a alguien. ¿Qué quieres decir con esa reflexión?
El amor de Jesús es radical. Acepta a cada persona exactamente como es. Pero también pone su dedo en la herida. Con Jesús, nunca hubo una contradicción entre la aceptación radical y la claridad.
El amor cristiano es más que bondad según el modelo del "te amo tanto que no quiero que sepas la verdad". El afán de evitar el escándalo es el camino seguro hacia un mensaje irrelevante e impotente.
(…)

También, hablando de las finanzas y los milagros, has dicho que "nosotros en Europa somos los únicos en todo el mundo que no creemos en lo sobrenatural" ¿Cómo se puede cambiar esto?
En primer lugar, considero que la creencia en la intervención sobrenatural y en los milagros de Dios es más frecuente en otras regiones de la tierra que aquí. En este país me preguntan a menudo cómo van las cosas en la Casa de Oración con las finanzas. Luego, cuando digo que vivimos de la Providencia, recibo miradas de incredulidad… Pero mi tesis es que la palabra de Jesús es verdadera: cuando buscamos primero el reino de Dios, se nos da lo necesario para ello (Mt 6, 33).

 
Entrevista de ERF Medien Schweiz
(Inicia en el segundo 30...)




 

Compartir en:

Portaluz te recomienda